En el corazón de Carora, la Fundación Las Manos que Ayudan se ha convertido en un refugio para los más vulnerables. Esta organización, ubicada en el sector Las Mercedes, Carora, estado Lara, ha estado trabajando incansablemente desde hace 8 meses, con el objeto de proporcionar alimentos a los más necesitados.
Todos los miércoles y viernes, el comedor comunitario de la fundación recibe a más de sesenta (60) adultos mayores y cincuenta (50) niños. Estos beneficiarios enfrentan diversas situaciones, como desnutrición, enfermedades crónicas e incluso en situación de calle. Además de ofrecer alimentos en el comedor, la fundación lleva a cabo un programa de entrega a domicilio, para más de treinta (30) personas con discapacidad.
“Nuestro objetivo es ofrecer un plato de comida caliente y un poco de compañía a quienes más lo necesitan”, afirma Yasmil Meléndez, presidente de la Fundación Las Manos que Ayudan. Y es que cada día, la fundación se enfrenta a historias conmovedoras que demuestran la gran necesidad que existe en la comunidad. “Por ejemplo, el pasado miércoles 24 de julio, una madre soltera llegó con su hija de apenas 3 años, sin nada que darle de comer. Son parte de las situaciones que se nos presentan a diario y evidencian la importancia de nuestra labor”, acotó Meléndez.
A pesar de los esfuerzos de la fundación, los recursos son limitados. La demanda de alimentos es cada vez mayor y la organización necesita el apoyo de la comunidad para poder continuar brindando asistencia a los más necesitados.




